Bill Withers – Still Bill (1972)

Tras su magnífinico “Just I Am” fechado en 1971 donde se incluía ese “Ain’t No Sunshine” citado anteriormente, el señor Withers destapó el tarro de las esencias para traer consigo un álbum, “Still Bill”, que además de ser una declaración de intenciones implícitamente representada en su título, suponía un redondeamiento del sonido desplegado en su primer trabajo, ya que del folk/soul, pasaba de buenas a primeras a ampliar sus horizontes estilísticos incorporando de esta forma a su sonido elementos del soul más profundo, ramalazos funk, cierta estética gospel y un aire nostálgico tomado del folk negro estadounidense. A este segundo trabajo pertenecen algunos de los momentos más inspirados de su carrera representados aquí en piezas tan sublimes e importantes para conocer la historia de la Black Music como “Who Is He (And What Is He To You)?” (versionada hace unos años por Me’Shell Ndégeocello), “Use me” (uno de mis prototipos de cómo debe hacerse música), el precioso y conocido himno gospel “Lean On Me”, el blues en fabulosa unión con el soul en “I Don’t Want You On My Mind”, esa explosión funk llamada “Kissing My Love” o la desagarradora “Lonely Town, Lonely Street”. ¿Qué cómo suenan estas canciones? A puros años setenta: elegantes guitarras wah wah que parecen hablar, baterías sincopadas repletas de ritmo, escalofriantes arreglos de cuerdas típicos del Blaxploitation... En definitiva, soul, soul y más soul. Por si fuera poco y faltara algo, ahí está la negrísima y carismática voz del señor Withers para el espoleo definitivo de un álbum sobresaliente que ya sólo con su parte instrumental merecería la pena. Es lo que tienen los fabulosos setenta, que hay mil discos para escoger, y que este “Still Bill” esté entre las preferencias de esos tiempos, es todo un logro. Por algo será. Señores/as, esto es alma y lo demás es tontería.